EL REFLEJO DEL DÍA (7/07/2013) 

De nada sirve
Nártleb ©

En el día de San Fermín sin chupinazo y sin santo a quien encomendarme...

Decía Julián Besteiro “Saben muy bien que para adquirir riquezas hay varios caminos. Uno, el más largo y penoso, es el del trabajo. Por ese camino la mayor parte de las veces le sorprende a uno la muerte antes de llegar al fin. Otro camino, más breve, pero lleno de peligros, es el del manejo de la ganzúa y la palanqueta. Pero hay, sobre todo, un camino brillante y seguro: en él la ganzúa se sustituye con ventaja por una ley, y la palanqueta por un reglamento. Hechos la ley y el reglamento en provecho propio, ya se puede entrar con entera confianza en la morada del vecino trabajador y arrebatarle cuanto haya producido con su trabajo.”

De nada sirve
que otros sean los culpables,
que otros robaran sin pudor
en implacables manejos
hasta la ruina total de las gentes del pueblo;
de nada sirve
que con sus insoportables ultrajes
nos llevaran a la 'esclavitud perfecta'
entre los silencios silbantes
y los gritos más sordos,
bajo los techos de los campos y calles;
de nada sirve
si quien es el pueblo,
las gentes llanas, cada cual con su cercano,
no es tal que uno siendo de todos ‘los cuales’,
dando fe,
en leal rebelión se eleve gritando al unísono,
en movimiento incansable,
¡NO al desahucio infecto!,
¡NO al desempleo infame!,
¡NO a la extinción de los derechos laborales!
¡NO al ocaso, ni a la muerte de la escuela!
¡NO al negocio sobre la salud y su consunción!
¡NO!, ¡NO! y mil veces ¡NO!

Pues ante tales villanías
y los perennes sufrimientos en las gentes de la villa,
-los que esta banda de criminales y sus comparsas
infringe en el devenir del tiempo y sus días
con sus reglamentos en mano a modo de palanqueta-,
será de nuevo el pueblo y sus voces,
sus pasos en todos los caminos y veredas,
será el pueblo más ligero que nunca de equipaje
quien levante su voz y su mano
de manera inflexible ante tanta miseria y desmanes …
Pues de nada sirve la queja
‘compadres’ de todos los lugares
si los dientes no se enseñan…

Comentarios